miércoles, 26 de febrero de 2014

Agricultores se concentran contra el "tarifazo" elétrico


Critican que con el nuevo sistema el regadío es insostenible, ya que supone un aumento de costes de más de cien millones 


Agricultores concentrados detrás de una pancarta: Damian Torres.


Regantes de la Comunitat Valenciana y de Murcia se han concentrado en Valencia bajo el lema "El regadío agoniza. No al tarifazo eléctrico" en una protesta conjunta frente al incremento de los costes eléctricos que vienen asumiendo desde 2008 tras la desaparición de la tarifa específica para regadíos. 

"El aumento de los costes, cifrado en más de 100 millones de euros, supondrá que se abandonen las tierras", ha denunciado el presidente de la Federación de Comunidades Regantes de la Comunitat Valenciana (Fecoreva), Benjamin Aparicio, en declaraciones a los periodistas. 

 La concentración, convocada por Fecoreva y por la Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore), se ha celebrado simultáneamente en Valencia, donde más de un centenar de personas se han reunido frente a la Delegación del Gobierno, y en Badajoz, Sevilla y Zaragoza. 

Durante el acto de protesta, se ha llevado a cabo la lectura de un manifiesto con las reivindicaciones de los regantes al Gobierno central, que posteriormente ha sido firmado por representantes del sector y entregado a la delegada del Gobierno, Paula Sánchez de León. 

Entre las peticiones mencionadas se encuentra volver a la tarifa específica con la que contaron hasta 2008 y la aplicación de un IVA reducido que les permita "competir con otros productos europeos", ha especificado el secretario general de Fenacore, Juan Valero. 

El presidente de Fecoreva ha explicado que a la Comunitat Valenciana "le afectan especialmente" las políticas energéticas de los últimos seis años "debido a que tiene más de un 80 % de superficie de regadío modernizada". 

Esto ha supuesto, según Aparicio, "un coste de más del 1.000 % en potencia y un aumento de más de un 50 % en el pago de energía eléctrica". 

Valero ha señalado por ello que el Gobierno central "debería ser sensible con la situación, tal como ha hecho el Gobierno italiano", porque "el tarifazo afecta a más de 50.000 regantes y tres millones de hectáreas de tierra en España". 

Aparicio, por su parte, ha asegurado que "el regadío es esencial para la Comunitat Valenciana y para toda España porque el sector agroalimentario representa casi el 20 % del PIB nacional". 

Como alternativa ante la situación, Valero asegura que "ya hay zonas que están volviendo al sistema de secano y de regadío por gravedad, algo que supone un gran consumo de agua". 

En cuanto a la posibilidad de utilizar energías renovables, el presidente de Fecoreva asegura que "se está barajando, pero también se necesita autorización gubernamental". 

María Pilar Ortiz, presidenta de la Comunidad de regantes de Caudiel, manifiesta que "los gobernantes están para gobernarnos y deberían responder por nosotros, porque comen de nuestras tierras".

Publicado en: Las Provincias
 

jueves, 20 de febrero de 2014

Las tres maneras de pagar el nuevo recibo de la luz a partir de abril


El nuevo sistema de fijación de precios de la electricidad que se pondrá en marcha a partir del próximo 1 de abril contemplará tres opciones de facturación. Así lo ha precisado hoy el ministro de Industria, José Manuel Soria, durante la sesión de control al Gobierno en el Pleno del Congreso. 

El ministro ha señalado que los consumidores domésticos podrán firmar contratos bilaterales con las empresas comercializadoras, una opción que ya existe actualmente aunque es utilizada "por muy pocos" ciudadanos. 

La segunda opción con que contarán los clientes pasa por acogerse a un "contrato estándar" con una tarifa fija para un periodo establecido, probablemente de un año. 

La tercera posibilidad es pagar "estrictamente" la energía consumida a precio de mercado. En caso de tener un contador inteligente, que discrimina por horas, se aplicaría el precio de cada momento a la energía consumida a lo largo de un mes, mientras que si no se cuenta con uno de estos aparatos la facturación seguirá siendo bimestral y el precio se calculará en función del promedio durante ese tiempo. 

Han fracasado "rotundamente" 

Ante estas explicaciones, el diputado socialista Román Ruiz Llama ha advertido de que si la fijación de precios se sigue basando en el actual sistema, que "adolece de falta de competencia" y parte de unos costes de producción que "no son reales", el resultado "no podrá ser muy diferente" al actual, por lo que "ése es el problema de fondo que hay que atajar". "

La Comisión Europea (CE) ya se lo ha dicho: España tiene un mercado de competencia ineficiente, en un mercado que favorece una concentración excesiva", ha recordado Ruiz. Además, duda de los ahorros del 3% en la factura que prevé Industria con el nuevo sistema sobre todo porque apenas un 30% de los consumidores cuenta con un contador inteligente, que sería el que permitiría esa rebaja. 

A renglón seguido, ha criticado a Soria por llevar dos años aplicando reformas "opacas, con abusos reiterados del decreto ley y partiendo de un diagnóstico equivocado" y le ha dicho al ministro que "ha fracasado rotundamente" con una Ley del Sector Eléctrico que "quedó superada por los acontecimientos" el mismo día que se aprobó, que fue cuando se celebró la última subasta Cesur que posteriormente hubo de ser cancelada. 

Una anulación que "generó una alarma social" que "desbordó por momentos" al Gobierno y le llevó a "intervenir" los precios en una decisión "sin precedentes en un mercado liberalizado". "Y ahora anuncian este nuevo sistema. Vistos los antecedentes, ¿no sería más prudente esperar y no generar expectativas (sobre el ahorro) que igual luego hay que rectificar?", ha recomendado. 

La luz subió un 67% de 2004 a 2011 

En su turno de réplica, Soria ha recordado que entre 2004 y 2011 la energía subió un 67,2% según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), lo que supone una media del 6,9% anual, mientras que el año pasado los precios cayeron un 3,1%, por lo que "no hay ni punto de comparación entre la evolución de un periodo y de otro". 

Además, ha defendido la anulación de la subasta de diciembre que decidió la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que es el órgano regulador que podía tomar esta decisión ante las "circunstancias atípicas" que detectó. "Entiendo que a usted le hubiera gustado más que no se hubiera anulado esa subasta", ha reprochado finalmente al diputado socialista. 

Fuente: Expansión
 

miércoles, 19 de febrero de 2014

Nuevo sistema de precios de la luz: ¿pagaremos menos?


El nuevo método, que entrará en vigor el 1 de abril, supone un cambio radical, pero encierra muchas incógnitas Después de saltar el escándalo en el mes de diciembre con en la última subasta de la luz celebrada en el que se reflejó una subida récord del 11% y el parche decretado por el Gobierno para dejar el alza de precios en el 2,3% nos quedaba saber cómo sería la tan cacareada reforma que lleve a un recibo de la luz más trasparente y justo para los consumidores. 

La respuesta la hemos visto esta semana y de momento ha conseguido lo impensable, unir en sus críticas a la industria eléctrica y a organizaciones de consumidores. Los primeros ven que el nuevo sistema en el que precio cobrado por kilovatio/hora consumido se determinará haciendo un promedio de los precios marcados en el mercado eléctrico mayorista en el período facturado, una excesiva intervención del Estado para los segundos llegan incluso a acusar de incumplir la normativa de consumo al desconocer previamente el consumidor el precio del servicio contratado. 

Sea de una forma u otra, el próximo 1 de abril entra en vigor una nueva reforma con la intención de que sea la reforma "definitiva" con muchas dudas y preguntas por parte del consumidor, a quien le afecta de lleno esta reforma: 

¿A quién afecta? 

De forma directa a los que tenían contratada la hasta ahora denominada Tarifa de Último Recurso (TUR) ahora denominado Precio Voluntario al Consumidor (PVPC), unos 16 millones de consumidores. Pero también clientes de tarifas libres cuyo precio de electricidad estuviera referenciado al sistema de antigua subastas. Al desaparecer esta, tomaron el nuevo sistema como referencia. 

¿Cómo se calculará el precio? 

La tarifa eléctrica está integrada por varios componentes, uno de energía, que sirve para cubrir los costes de la generación de energía y que se fijaba tras el resultado de subastas, otro los denominados "peajes de acceso" determinados por el Gobierno, y que cubren los costes regulados (distribución, transporte, las primas a renovables y a la cogeneración..) y un tercero que son los impuestos. 

Con este nuevo sistema se cambia la forma en la que se determina el precio del primer tramo que supone aproximadamente el 37,4% del recibo. De utilizar las subastas CESUR a partir del 1 de abril el precio para el consumidor se fijará cada día, teniendo en cuenta el precio mayorista (pool). En este mercado se casan la oferta y demanda de los productores y comercializadores de la electricidad mediante una subasta diaria en la que el precio puede fluctuar de forma importante. Por ejemplo, los días más fríos del invierno y de más calor en verano son los de más demanda de electricidad y por tanto los de una energía más cara. 

Para el resto de los componentes, peajes e impuestos, el gobierno seguirá fijándolo y con ventaja, ya que desde 1 enero de este año se contempla que se regularicen esta parte si se producen desviaciones de los costes previstos del sistema eléctrico. 


¿Y cómo se aplica? 

El Gobierno augura que la tarifa bajará. Incluso cifra la rebaja en un 3%. Pero no puede saberse: dependerá de cómo cotice el pool. Si el usuario tiene contador inteligente, que mida el consumo por horas, en su factura mensual vendrá desglosado cuánto consumió en cada momento y qué precio tenía el kilovatio en ese preciso instante, según su cotización en el pool. Si el usuario no tiene contador inteligente, la eléctrica calculará la media de todos los días del periodo de facturación, que seguirá teniendo carácter bimestral. Para evitar la fuerte volatilidad en los recibos, el Gobierno va a ofrecer la posibilidad de que los usuarios se acojan a las futuras ofertas que, se supone, harán las eléctricas, con una especia de tarifa plana para todo un año: pagar lo mismo por cada kilovatio, independientemente de lo que haga el pool. 

¿Qué diferencia hay entre los que tengan un contador digital y otro normal? 

Aunque cada día hay una subasta, el precio varía a lo largo de la jornada. Por las mañanas y a última hora de la tarde hay más demanda y la energía es más cara, mientras en la madrugada es el momento de menor demanda y por tanto se usa las fuentes de energía más barata y el precio es inferior. Con todo ello el sistema permite que quien tenga un contador digital medir y cobrar hora a hora quien no tenga pagará por la media diaria. 

¿Podré no optar por este sistema de precios? 

El nuevo sistema establece la posibilidad de que las empresas distribuidoras puedan vender tarifas planas que garanticen un mismo precio durante un periodo determinado de tiempo (generalmente un año). Lo normal es que sea algo superior a la media de la tarifa para que la empresa cubra posibles oscilaciones al alza. La posibilidad se contempla pero lo más probable es que tarden unos cuantos meses en que se ofrezcan estas condiciones. 

¿Pagaremos menos? 

No está claro. Por un lado el Ministerio de Industria asegura que el sistema de subasta encarecía esta parte variable (como hemos visto el 37% del recibo) en un 10% debido a que en el sistema de subastas intervenían entidades ajenas a la producción y distribución de electricidad (como bancos de inversión) y por tanto suponía un coste de 300 millones al año. Pero no queda claro cómo se trasladará al consumidor. 

En primer lugar no hay que olvidar que el Gobierno ha aprobado un cambio en la fijación de precios de la parte regulada que supone más del 41% del recibo. Con esta modificación se da más peso a la parte fija (potencia) que a la variable (energía consumida) con ello se castiga a los consumidores que menos consumen y en teoría beneficia a grandes familias que consumen más. 

Pero también queda una segunda parte, la gran incógnita de que pasará en momentos de alto precio de energía. Estos días de temporal el precio de la energía es bajo teniendo en cuenta todo lo que está generando las fuentes eólicas o hidráulicas, pero ¿se imaginan un verano sin lluvia, viento alta temperatura y gran consumo de energía por el uso del aíre acondicionado? Sólo cuando se ponga en marcha el sistema y haya transcurrido suficiente tiempo veremos si en verdad supone un ahorro para el consumidor. 

En definitiva un nuevo sistema que desde luego es una revolución con respecto a cómo se calculaba el precio de la parte variable pero aunque nazca con vocación de permanencia su éxito o fracaso sólo lo marcara su evolución en el tiempo.

Autor: Antonio Gallardo.
Publicado en: Información

martes, 18 de febrero de 2014

La energía solar sin primas, ya es realidad


La energía solar es limpia, local, genera mucho empleo, es fácil y rápida de instalar, simple de mantener... pero es cara. Ese era el mantra al que los impulsores de la energía solar se han tenido que enfrentar a lo largo de los años, y parecía que había que resignarse a mantener la dependencia de fuentes de energía más sucias, pero aparentemente más baratas. La tecnología solar fotovoltaica lleva mucho tiempo disponible, pero necesitaba apoyo público para comercializarse. Y las primas han sido el sistema de apoyo más eficiente. 



Sin embargo, la energía solar está recorriendo su curva de aprendizaje mucho más rápido de lo que nadie había previsto. Y en consecuencia, las nuevas plantas solares cada vez han necesitado menos apoyo. Hoy un panel solar cuesta del orden del 80% menos que hace solo cinco años para dar la misma energía. Y se prevé que los costes sigan bajando en otro 50% hasta 2020. 

Pero ya no tenemos que esperar más para conseguir energía solar por menos de lo que cuestan las energías sucias. La energía solar ha alcanzado ya una meta histórica: a finales del año pasado, por primera vez, se conectó a la red una central solar que vende su electricidad al precio de mercado, esto es, obteniendo la misma remuneración que cualquier central eléctrica convencional. Sin subvenciones, sin primas. 

La planta en cuestión, desarrollada por la empresa Enerpro, está en la provincia de Sevilla, en una finca de 6 hectáreas. Con estructuras que siguen el sol en un eje, ya tiene un megavatio conectado a la red, y este año se seguirán construyendo las restantes fases hasta completar los 2,5 MW del proyecto. La empresa planea conectar 12 MW en distintas plantas este año, y empezar con grandes plantas de 300 MW el año que viene. Todo ello a precios de “pool”, es decir, vendiendo la electricidad en el mercado eléctrico mayorista, como hacen el resto de productores de electricidad convencionales, ya que según la empresa, el coste total de la electricidad que van a producir, incluyendo la inversión y la operación y mantenimiento, es el más bajo de todo ese mercado. 

Enerpro ha sido la primera, pero no es la única. El año pasado, Red Eléctrica de España había recibido cerca de 200 peticiones para conectar a la red más de 40.000 MW de plantas fotovoltaicas. La barrera para conectarlas ya no es económica sino administrativa, ya que quienes invierten en ellas consideran que la electricidad que producirán puede competir en el mercado y ser rentable sin apoyo ninguno. 

¿Cómo hay que interpretar esta nueva realidad? 

Desde luego, no como está haciendo el Gobierno, recortando retroactivamente los apoyos a quienes invirtieron en plantas solares en años pasados, cuando la tecnología era más cara y los apoyos eran necesarios. Gracias a quienes invirtieron en la energía solar en esas condiciones, y gracias al sistema de apoyo que costeamos entre todos, hemos llegado a tener energía solar competitiva en tan poco tiempo. 

Para valorar lo que esto significa hay que ver las cifras en su contexto. 2013 terminó con 4.681 MW de potencia solar fotovoltaica instalada en España, que suministraron el 3,2% de la demanda eléctrica. Si todas las plantas solares que han pedido conectarse lo lograsen, podríamos esperar que la electricidad solar fotovoltaica disponible se multiplicase por diez, lo que equivaldría a casi un tercio de la demanda total. Si tenemos en cuenta que las renovables ya suministraron el año pasado un 42,4% de la demanda eléctrica peninsular, está claro que alcanzar un sistema eléctrico limpio y renovable está al alcance de la mano. 

Si lo que se cuestiona es la viabilidad técnica, la respuesta también nos la da la realidad: el sistema eléctrico español ha sido capaz de integrar ya hasta un 67% de electricidad de fuentes variables, como pudimos comprobar con el récord eólico alcanzado el día de Navidad, algo impensable hace bien poco, y todo ello sin apagones ni nada parecido. 

Esto solo lo pueden parar oscuros intereses. Pero esos intereses existen y son muy fuertes, tanto en las grandes eléctricas como en el Gobierno español. 

José Luis García Ortega, Responsable del Área de Investigación e Incidencia y del Área de Cambio Climático y Energía

Publicado en: greenpeace.org
 

sábado, 15 de febrero de 2014

La luz cuesta ya un 64% más en Burgos que en Kentucky


El Gobierno pone como ejemplo 
del disparate energético al grupo Antolín 

La multinacional paga menos por la luz 
en una planta de EEUU 
que en la de su propia sede 

Fotografía de: Santí Otero EFE.

Este tipo de industrias medianas son las preferidas ahora por el Poder «Me ha dicho Soraya que los del Ibex no sois la economía real, la decisiva para sacar España de la crisis. Tiene en parte razón, pero no es buena la actual pérdida de diálogo del Gobierno con los bancos y las principales empresas de este país», afirma el presidente de una empresa del Ibex que pide el lógico anonimato. «La mayoría del Ibex son bancos o empresas que tienen negocio que depende de la regulación, ellos pueden hacer más sacrificios que otros». replican en el Gobierno, que se fija este objetivo oficial: «Desbancarizar» el país, disminuir el poder de las eléctricas y apoyar a industrias exportadoras de tamaño medio. 

El ministro de Economía, Luis de Guindos, tiene mandato para facilitar que las empresas recurran cada vez menos a la banca para financiarse; y el de Industria, José Manuel Soria, ha vuelto a obtener respaldo de Rajoy en su nuevo varapalo a las eléctricas, esta vez las renovables. El presidente de Acciona, José Manuel Entrecanales, simboliza el golpe. La última orden ministerial rejonea en 200 millones el beneficio del grupo y sus acciones cotizan a niveles de 2004 cuando heredó la presidencia de su padre. 

A eso hay que unir el inminente nuevo mecanismo de cálculo de tarifas en España e iniciativas contra «el oligopolio» que es como aún ven en el Gobierno y en la Comisión Nacional de Mercados y de la Competencia (CNMC), al sector energético. 

En cambio, gustan en el poder empresas como el grupo Antolín «que no está en lobbies de los del Ibex». Esta industria burgalesa es el primer exportador mundial de revestimientos de techos de automóviles con un 25% del mercado de EEUU. Da empleo a 14.000 personas en el mundo, un 20% de ellas en España. ¿Y qué necesita Antolín? Entre otras cosas, según el Gobierno, abaratar su factura de la energía para que puedan competir con sus rivales en el exterior. El discreto presidente del grupo, José Antolín, no comenta, pero el Ministerio conoce la diferencia del coste de la energía entre su fábrica en Kentucky y la de Burgos en lo que constituye uno de los disparates del momento. En aquel estado de EEUU -cuya renta per cápita es similar a la de España por ser de los más pobres del país- el coste de la luz en la fábrica de Antolín es de apenas 0,054 céntimos por kilovatio hora, mientras que en la de Burgos, es de 0,089, ¡un 64% más! En la fábrica de Francia es más asequible en un 10%. 

Si no se abaratan otros costes como el de la luz, la alternativa es ofrecer salarios mucho más bajos que en Kentucky y entonces no repuntará el consumo en España y proliferarán movimientos como el de Gamonal donde, por cierto, viven empleados de Antolín. 

Los expertos sostienen que justo entre Burgos y el País Vasco existe una importante bolsa potencial para extraer gas no convencional, el combustible de moda, junto a una política más favorable a la reindustrialización, está siendo decisivo para que EEUU esté abaratando tanto su factura energética. La UE, incluida España, se resiste por ahora a abordar esa carrera con fundadas dudas medioambientales, pero el resultado de la factura es el que es, y eso que para Antolín el drama es menor que para empresas más intensivas en uso de energía, como Arcelor Mittal, según advierte su presidente Lakshmi Mittal. El economista del grupo europeo de estrategia climática, Michael Grubb, asegura en cambio a Financial Times que «es un mito que la competitividad europea la determina el coste de la energía». 

El presidente de Unesa, Eduardo Montes, repite que se puede y debe abaratar la luz, pero retirando del recibo los 50.000 millones que llevan pagando los consumidores por las energías renovables. La factura incluye también los 6.000 millones incluidos intereses que está costando ya a los consumidores la moratoria nuclear de Felipe González de 1995. La CNMC dice en su último informe que aún quedan pendientes 250 millones más para compensar a, sobre todo, Iberdrola y Endesa por aquel cierre obligado de Lemóniz, Valdecaballeros y Trillo II. 

Si todo ello y más se quita del recibo, lo tendrían que pagar en vez de los consumidores, los contribuyentes. Soria no deja de subir la luz, pero intenta al tiempo sablear al sector jugándose que éste deje de invertir. «Es como si el Gobierno estuviera en guerra», se desahoga en privado un directivo de Acciona. En Unesa critican que creando más empleo les tratan peor que al sector de automoción. «Las eléctricas han financiado su expansión exterior con el recibo español», replican en el poder. Mientras, en Burgos, más caro que en Kentucky.

Escrito por: Carlos Segovia y publicado en: El Mundo
 

miércoles, 12 de febrero de 2014

Más malabarismos eléctricos


Una vez más el estado nos sorprende con un balanceo de peajes introduciendo cambios que, en general, pueden suponer una bajada en el coste de la factura, pero a costa de penalizar fuertemente los suministros más ociosos (segundas viviendas), más eficientes o simplemente los más afectados por la pobreza energética, además de aquellos suministros profesionales, tanto en baja como en alta tensión.


Como ocurriera en Agosto del año pasado, se ha vuelto a hacer cambalache de peajes, subiendo la parte de la potencia (el fijo de las facturas) de todas las tarifas y bajando la parte de energía (el consumo de las facturas) en consumidores domésticos y pequeñas empresas, pero con una sorpresa, en consumidores de mayor consumo, con tarifas mayores, la parte de la energía ¡también sube!:




De estos cambios, llaman la atención varios aspectos:
  • Las variaciones de los peajes de potencia es justo al revés que las del pasado agosto: Los consumidores domésticos suben bastante más que los profesionales.
  • En la energía, bajan más las tarifas domésticas tipo 2.0 Las tipo 2.1 no lo hacen con tanta intensidad
  • Las tarifas profesionales de baja y alta tensión (3.0A, 3.1 y 6.1) verán incrementados tanto el término de potencia como el de energía, empeorando, una vez más, la competitividad de nuestras empresas.
  • Es curiosa la variación de peajes de energía de la tarifa indicada para recarga de coches eléctricos 2.0DHS que en las horas nocturnas sufren la mayor de todas las bajadas de peajes, nada menos que un 33,5%. ¿Será esto un indicador de promoción del coche eléctrico? (en la actualidad hay menos de 1.000 suministros con esta tarifa). Esta tarifa es la única que ha tenido variación de cambios en los diferentes periodos, todas las demás han tenido una variación lineal, subiendo o bajando todos los periodos en igual porcentaje.

Variación del PVPC (TUR)

Estos cambios han afectado a los precios de la tarifa PVPC, de la siguiente manera:

  • Término de potencia: 42,043426 € por kW contratado al año, resultando un incremento del 17,9%
  • Término de energía: 12,4107 ¢€ por kWh consumido, resultando un descenso del 6,9%

Esto supone un encarecimiento de la factura a los que menos gastan, abaratándola a los que más lo hacen, luego, una vez más, no podemos hablar de una subida o bajada fija sino que dependerá de nuestros consumos particulares. En la siguiente gráfica se ve cómo afectan los cambios. Para calcular su caso en concreto no tiene más que buscar en su factura el consumo mensual que suele tener y localizar el valor más cercano del eje x, localice entonces la curva de potencia contratada más cercana a la de su suministro: el eje y le indicará en qué porcentaje variará su factura.



¿Podemos aprovecharnos algo de esta situación?

Rotundamente ¡SI! Muchos hogares y especialmente en empresas de alta y baja tensión donde el término de potencia cobra cada vez mayor importancia, tienen unas potencias contratadas muy superiores a las demandadas realmente. Es el momento de tener muy controlada la potencia contratada e intentar ajustarla lo máximo posible a las necesidades reales. Ajustarla supone reducir el impacto de la subida o incluso conseguir ahorros y así estaremos aprovechando en mayor medida las bajadas en el término de energía.

Debemos tener presente que por cada tramo de bajada en las tarifas domésticas (1,15 kW) nos estaremos ahorrando ahora 61,5€ al año mientras que en las profesionales es del orden de 100 a 140 € por cada kW de bajada (dependiendo de la tarifa).

Con esta variación en los peajes, la cantidad de dinero que estamos regalando a eléctricas y estado en forma de potencia contratada no utilizada es de casi 5.000 millones de euros.


martes, 11 de febrero de 2014

La luz ha subido un 75,4% en diez años para el usuario medio


El Gobierno sube en febrero un 18% el término de potencia y baja un 7% el de energía eléctrica

Bruselas acusa recibo de la denuncia de FACUA por el incumplimiento de la directiva europea sobre el mercado interior de la electricidad.

Según los análisis de FACUA, la factura se ha encarecido un 35,1%
en los últimos cinco años para el usuario medio.

FACUA-Consumidores en Acción informa de que el Ministerio de Industria, Energía y Turismo ha subido en febrero un 17,9% el término de potencia y ha bajado un 6,9% el de energía eléctrica en las tarifas que desde el mes pasado denomina Precios Voluntarios para el Pequeño Consumidor, sustituyendo a la Tarifa de Último Recurso (TUR).

Según los análisis de FACUA, la factura se ha encarecido un 35,1% en los últimos cinco años para el usuario medio. Con las tarifas fijadas en el primer semestre de 2009, el recibo representaba 57,29 euros mensuales (impuestos indirectos incluidos) y hoy asciende a 77,38 euros. En diez años, la subida ha sido del 75,4%; con los tarifas vigentes durante todo 2004, el usuario medio abonaba 44,11 euros.

Con la resolución publicada este sábado 1 de febrero en el BOE, el precio del kW de potencia contratada ha pasado, redondeando a dos decimales, de los 2,97 euros mensuales en los que se había fijado desde agosto de 2013 a 3,50 euros mensuales (más el 27,19% de impuestos indirectos). En cuanto a la energía consumida, pasa de los 0,133295 euros por kWh establecidos este enero a 0,124107, una tarifa casi idéntica a la que el Gobierno estableció en agosto del año pasado para después subirla un 6,6% en cinco meses.

Un usuario con 4,4 kW de potencia contratada y 366 kWh de consumo mensual (la media en las viviendas ocupadas según los análisis de FACUA) pasará a pagar con las nuevas tarifas 77,38 euros mensuales (impuestos indirectos incluidos), lo mismo que abonaba con las tarifas vigentes entre octubre y diciembre del año pasado.

Por su parte, un usuario con 4,4 kW y un consumo de 250 kWh mensuales abonará 59,07 euros, el mismo importe que con las tarifas fijadas este enero y 0,95 euros al mes más (un 1,6%) que los 58,12 euros que suponían con las publicadas en el BOE en octubre de 2013.

FACUA reclama una tarifa basada en el coste real de la energía  

FACUA insiste en reclamar al Ejecutivo que modifique de una vez el sistema para la fijación de las tarifas eléctricas, que favorece la especulación con un suministro esencia. Así, demanda que deje de basarse en la opaca subasta del sector para establecer un precio regulado basado en el coste real de la producción energética. Asimismo, exige una auditoría histórica del déficit de tarifa.

El pasado diciembre, la asociación denunció al Gobierno de España ante la Comisión Europea por incumplir la directiva sobre normas comunes para el mercado interior de la electricidad. FACUA advierte de que tanto el actual Gobierno como el anterior no han garantizado la protección de los consumidores vulnerables ni unos precios de la electricidad "razonables, fácil y claramente comparables, transparentes y no discriminatorios". Es lo que establece el artículo 3 de la Directiva 2009/72/CE del Parlamento Europeo y del Consejo de 13 de julio de 2009 sobre normas comunes para el mercado interior de la electricidad, de obligado cumplimiento para los Estados miembros de la UE.

En la denuncia, de la que acaba de acusar recibo Bruselas, FACUA expone que el Gobierno no tiene implementada ninguna medida que proteja realmente al consumidor vulnerable y que, cada año, aumenta el número de familias excluidas del suministro energético, en contra de los mandatos de la directiva.

FACUA lamenta que el grupo parlamentario que sustenta al Gobierno (PP), se negara recientemente a debatir la propuesta del grupo Izquierda Plural (que contaba con el apoyo del principal grupo de la oposición, el socialista), entre cuyos objetivos estaba evitar dichos cortes de suministro durante la estación invernal.

Estudio comparativo sobre suministro eléctrico en 10 países de Europa


El precio del kWh regulado en España resulta un 48,2% más caro que el de la tarifa regulada más barata de las analizadas, encontrada en Hungría.

El precio medio del kWh en el mercado libre de España es un 68,3% más caro que en Estonia,
el país con el precio medio del kWh libre más económico de los comparados.


FACUA-Consumidores en Acción ha elaborado un estudio comparativo sobre suministro eléctrico en diez países de Europa con el objetivo de conocer con el mayor grado de detalle posible cómo se efectúa la prestación de este servicio básico para los consumidores en otros países europeos (consúltalo en español o en inglés).

En el informe, realizado entre septiembre de 2013 y enero de 2014, FACUA analiza la situación del suministro eléctrico en diez países de los cuales ocho forman parte de la Unión Europea (Chipre, España, Estonia, Francia, Grecia, Hungría, Italia y Portugal) y los otros dos, Albania y Serbia, son potenciales candidatos al acceso. Excepto estos dos últimos y Hungría, los demás forman parte de la zona euro.

Se trata de la primera iniciativa de colaboración conjunta propuesta por FACUA a nivel europeo, con la que la asociación trata de arrojar luz sobre un sector tan importante como desconocido para muchos de los consumidores del continente.

Comparativa de tarifas reguladas

Entre otros aspectos, el estudio establece una comparativa de tarifas según el precio regulado del kilovatio por hora (kWh) consumido.

Así, el precio del kWh regulado en España, con 0,124985 euros por kWh al momento de la realización de la encuesta (siempre sin impuestos incluidos), resulta un 48,2% más caro que el de la tarifa regulada más barata analizada, los 0,06475 euros de media de Hungría. Otra de las tarifas reguladas más económicas es la de Albania, con un precio medio de 0,075398 euros por kWh. Sólo Portugal (0,1405 euros/kWh) y Chipre (0,225 euros/kWh de media) disponen del kWh regulado más caro que en España. Comparativa de la electricidad en el mercado libre Seis de los diez países participantes en este estudio han aportado datos comparativos sobre las ofertas existentes en el mercado libre de suministro eléctrico.

El precio medio del kWh en el mercado libre de España (0,139141 euros) es un 68,3% más caro que en Estonia, el país con el precio medio del kWh libre más económico de los países comparados, con 0,044117 euros. España es, además, el país con el precio medio del kWh en el mercado libre más caro de los analizados.

A España le sigue de cerca Portugal (0,137383 euros de media), dos países en los que, a pesar de que los consumidores pueden optar de forma generalizada por la tarifa regulada por sus gobiernos o por el mercado libre, las tarifas medias para esta última opción resultan más caras que las protegidas.

Además de Estonia, entre los países con el precio medio del kWh más barato de los analizados están Francia, con 0,086533 euros por kWh, y Grecia, con 0,088 euros.

Gratuidad obligatoria del teléfono de atención al cliente

Cuatro de los diez países analizados cuentan con el imperativo legal para las compañías eléctricas de habilitar un teléfono de atención al cliente gratuito (Estonia, Grecia, Italia y Serbia). En el resto no existe tal obligación, salvo en la comunidad autónoma de Cataluña, donde la ley autonómica sí establece este requisito para las compañías.

Disparidad regulatoria

FACUA ha constatado una gran disparidad regulatoria entre los países analizados en materia de suministro eléctrico, pero también elementos que comparten una cierta semejanza. Y ello a pesar de que, para los ocho países analizados que forman parte de la UE, resulta de aplicación la Directiva 2009/72/CE del Parlamento Europeo y del Consejo de 13 de julio de 2009 sobre normas comunes para el mercado interior de la electricidad.

Las mayores diferencias detectadas por FACUA se producen a la hora de establecer las condiciones para que los hogares puedan acogerse a la tarifa regulada por los Gobiernos de los nueve países que cuentan con precios regulados (todos excepto Estonia), donde no existe ninguna pauta común. En Albania, Chipre y Serbia, además, se da la circunstancia de que sólo existe un suministrador de electricidad.

Primera iniciativa conjunta impulsada por FACUA en Europa

Con el objetivo de promover las relaciones y la unidad de acción entre las organizaciones de consumidores del continente, la asociación ha impulsado esta iniciativa en colaboración con otros miembros de la organización Codaction-Consumers’ Democracy in Action, en la que está integrada FACUA, y con la de otras asociaciones.

Además de FACUA, las asociaciones que han participado en el estudio son Shoqata e Mbrojtjes se Konsumatorit Shqiptar (de Albania), AFOC-Association Force Ouvrière Consommateurs (Francia), Movimento Difesa del Cittadino (Italia) y Centra Potrošača Srbije-CEPS (Serbia), con las que FACUA mantiene convenio de colaboración; Cyprus Consumers’ Association (Chipre), TARTU Tarbijanoustamis-ja Infokeskus (Estonia), EPKAS Consumers’ Protection Union of Serres (Grecia), Fogyasztói és Betegjogi Érderkvédelmi Szövetség (Hungría), estas cuatro miembros de Codaction, y la Associaçao Portuguesa de Direito do Consumo (Portugal).

Guía para entender el nuevo recibo de la luz


El Gobierno parece dispuesto a revolucionar la factura de la luz que pagan la mayoría de los españoles. El Ministerio de Industria pondrá fin el próximo abril al actual sistema de subastas que sirve para fijar la tarifa, y lo sustituirá por un nuevo modelo que establecerá el precio en función de cómo cotiza la electricidad en el mercado mayorista.

El Ejecutivo busca soluciones para apaciguar las consecuencias el caos en que parece que se había instalado el sector eléctrico. La subasta de diciembre que servía para fijar la tarifa durante el primer trimestre se desbocó y obligaba a una inasumible subida del 11% desde enero. El Gobierno entonces decidió evitar el ‘tarifazo’ e improvisó un nuevo precio que limitaba el incremento al 2,3%.

Tras intervenir abruptamente el mercado, el Ministerio de Industria estaba abocado a establecer un nuevo sistema. Parece que lo ha encontrado. Éstas son algunas de las claves del nuevo recibo de la luz que millones de clientes empezarán a pagar el próximo abril.

¿A quién afecta la nueva tarifa?

Los cambios sólo afectan a los clientes que están acogidos a la tarifa regulada que son la mayoría. La antigua tarifa de último recurso (TUR) ha pasado a denominarse desde el pasado enero precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC) y a ella están acogidos más de 16 millones de clientes en España.

La tarifa está integrada por un componente energía que sirve para cubrir los costes de la generación de energía y que se fijaba en subastas trimestrales; un segundo componente que son los peajes de acceso que determina el Gobierno y que cubren los costes regulados (distribución, transporte, las primas a renovables y cogeneración, costes extrapeninsulares); y también por impuestos.

¿Cómo se establecía el precio de la luz hasta ahora?

El Gobierno fijaba directamente el nivel de los peajes de acceso, que representaban aproximadamente la mitad del recibo, y también los impuestos. El componente energético de la factura se establecía trimestralmente a través de subastas en la que participaban fondos de inversión, traders y las propias compañías eléctricas. Son estas pujas, las denominadas subastas Cesur, las que elimina ahora Industria para evitar sobresaltos como el ‘tarifazo’ de diciembre y, según el propio Ministerio, para abaratar la tarifa.

¿Cómo se fijará el precio a partir de abril?

Los peajes los seguirá fijado el Gobierno, aunque desde el 1 de enero se ha instaurado un nuevo sistema que contempla subidas automáticas si se producen desviaciones de los costes previstos del sistema eléctrico. Es en la fijación del componente energético en el que se produce una auténtica revolución. Desde el próximo abril esa parte del recibo se fijará no por subastas trimestrales, sino en función de la cotización del mercado mayorista (pool).

Si el usuario tiene contador inteligente, que mida el consumo por horas, en su factura mensual vendrá desglosado cuánto consumió en cada momento y qué precio tenía el kilovatio en ese preciso instante, según su cotización en el pool. Si el usuario no tiene contador inteligente, la eléctrica calculará la media de todos los días del periodo de facturación, que seguirá teniendo carácter bimestral.

Para evitar la fuerte volatilidad en los recibos, el Gobierno va a ofrecer la posibilidad de que los usuarios se acojan a las futuras ofertas que, se supone, harán las eléctricas, con una especia de tarifa plana para todo un año: pagar lo mismo por cada kilovatio, independientemente de lo que haga el pool.

¿Pagaré más o menos que hasta ahora?

Con el nuevo sistema de precios, el Gobierno calcula que el recibo se abaratará un 3% durante este año. Sin embargo, a pesar del optimismo oficial, los precios dependerán de cómo evolucione la cotización del pool, un mercado que se muestra extremadamente volátil. Fuentes del Ministerio de Industria, Energía y Turismo explicaron que el ahorro global con el nuevo sistema será superior a los 200 millones de euros, lo que equivaldría a esa rebaja del 3% que se espera y que los clientes empezarían a notar a partir del próximo mayo, cuando el nuevo sistema esté plenamente vigente.

¿Qué otros cambios hay en el recibo de la luz?

En paralelo a los cambios en el sistema de fijación de los precios, el Gobierno acaba de poner patas arriba la estructura misma del recibo de la luz: sube la parte fija de la factura (potencia contratada) y baja la parte variable (el consumo). El resultado es que cuanta menos electricidad se consume, mayor es el impacto del alza de la cuota fija y más sube la factura final. Y, en cambio, cuanta más electricidad se consume, la subida del fijo se diluye, e incluso puede suponer un ahorro para los clientes que más gastan.

Para la inmensa mayoría de los consumidores (los que tienen contratados una potencia inferior a los 10 kilowatios) la cuota fija aumenta un 20%, mientras que el componente de consumo se reduce un 17%. Con la nueva subida que entró en vigor el 1 de febrero, la cuota fija es de 42,04 al año por cada kilowatio contratado, el doble que hace un año. El doble. 

Escrito por:  David Page y Miguel Ángel Patiño y publicado en Expansión

lunes, 10 de febrero de 2014

El precio de la luz será como la Bolsa


El Gobierno va a revolucionar a partir de abril el mecanismo por el que se fijan los precios de la luz, de manera que los usuarios que ahora están acogidos a tarifas reguladas que se fijan cada trimestre, paguen el kilovatio consumido en función de cómo cotiza este en el mercado mayorista, o pool. 

Si el usuario tiene contador inteligente, que mida el consumo por horas, en su factura mensual vendrá desglosado cuanto consumió en cada momento y qué precio tenía el kilovatio en ese preciso instante, según su cotización en el pool. 

De 0 a 100 euros 

La volatilidad de los precisos puede ser espectacular. El mercado mayorista, donde se casan a diario las ofertas de generación de electricidad en España, por ejemplo ha estado marcando cero euros en la madrugada de hoy, debido a que había gran cantidad de energía eólica vertiéndose a la red. Sin embargo, para las diez de la noche de hoy, se están casando ofertas de generación a 14 euros el megavatio. 

Si el usuario no tiene contador inteligente, la eléctrica calculará la media de todos los días del periodo de facturación, que seguirá siendo bimestral. El precio medio del pool de hoy es de 3,18 euros por megavatio, pero el día 31 de enero, el precio era de 39 euros. En diciembre, los precios marcaron cifras record y se aproximaron a 100 euros. 

Tarifa plana 

Para evitar la fuerte volatilidad en los recibos, el Gobierno va a ofrecer la posibilidad de que los usuarios se acojan a las futuras ofertas que, se supone, harán las eléctricas, con una especia de tarifa plana para todo un año: pagar lo mismo por cada kilovatio, independientemente de lo que haga el pool. 

Este sistema, sustituirá el viejo esquema, que se basaba en subastas trimestrales denominadas Cesur. El Gobierno intervino los precios en diciembre porque la Cesur de ese mes se disparó y hubiera obligado a subir los precios más del 11%. 

Ahorro del 3% 

Con el nuevo sistema de precios, el Gobierno calcula que permitirá de media un ahorro del 3% en la factura anual a los usuarios. Eso, sin embargo, está por ver en función de cómo evolucione el pool. Fuentes del Ministerio de Industria, Energía y Turismo explicaron que el ahorro global con el nuevo sistema será superior a los 200 millones de euros. Esto supondrá un abaratamiento del 3% de media en los recibos de los clientes a partir del próximo mes de mayo, que es cuando el sistema estará plenamente vigente, una vez que las eléctricas hayan hecho todas las adaptaciones técnicas.

Artículo de: Miguel Ángel Patiño publicado en: Expansión

El nuevo lío del recibo de la luz


El Gobierno acaba de poner patas arriba la estructura del recibo de la luz: sube la parte fija de la factura (potencia contratada) y baja la parte variable (el consumo). El resultado es que cuanta menos electricidad se consume, mayor es el impacto del alza de la cuota fija y más sube la factura final. Y, en cambio, cuanta más electricidad se consume, la subida del fijo se diluye, e incluso puede suponer un ahorro para los clientes que más gastan. 

El sector eléctrico parece haberse instalado en el vodevil. En las últimas semanas, propios y extraños han visto cómo, entre acusaciones y desmentidos, el Gobierno intervenía abruptamente los precios, se evitaba un 'tarifazo' y se improvisaba una nueva tarifa, se anuncia que en abril se pondrá fin con el sistema de subastas, se cambia el peso de las diferentes partes de la factura en el precio final... Más lío para un recibo que para la mayoría de consumidores ya era un lío. 

Los clientes han visto, sólo en el último mes, cómo el Ministerio de Industria anunciaba una subida media del 2,3% del recibo para el primer trimestre del año y también aprobaba un incremento de la parte fija de la factura (al tiempo que rebajaba la parte variable), lo que supondrá una subida para muchos clientes y un ahorro para otros, en función de cuánta electricidad consumen. Esto es, para algunos consumidores el año ha comenzado con dos subidas en un mes; para otros, la subida de enero puede acabar por no notarse (o notarse menos), quedando parcialmente compensada por el menor peso de la parte variable. 

El Gobierno ha reestructurado el peso que tienen los diferentes componentes del recibo. Desde el 1 de febrero, la parte fija de la factura (lo que se paga por la potencia contratada) sube de media un 18% y la parte variable (la que depende de cuánta electricidad se consume) baja un 7%. En realidad, estos porcentajes son la subida y la rebaja medias. La inmensa mayoría de los consumidores (hasta un total de 25,8 millones de clientes) tienen contratada una potencia inferior a 10 kilowatios y para ellos la subida es mayor: la cuota fija aumenta un 20%, mientras que el componente de consumo se reduce un 17%. Con la nueva subida que entró en vigor el 1 de febrero, la cuota fija es de 42,04 al año por cada kilowatio contratado, el doble que hace un año. El doble. 

¿Dos subidas en un mes? Sí, pero no 

La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha calculado que la subida de la parte fija del recibo se traducirá en un aumento medio (sí, también de media) de entre el 1 y el 2,3% del precio final que pagan los clientes. Un cálculo que ha llevado a muchos a dar por hecho que se han producido dos subidas de la luz en sólo un mes. Sin embargo, esta afirmación tiene dos matices: uno, que la subida de la cuota fija y el cálculo de los efectos que tendrá en la factura (ese alza de entre el 1 y el 2,3%) son en relación al nivel de finales 2013, no en relación a la nueva tarifa de 2014; y dos, que al tratarse de un cambio en la composición del recibo, sus efectos están condicionados a cuánto se consume y, por tanto, tendrá un impacto muy diferente para cada cliente. 

Veamos. La subida del 20% de la cuota fija -la que se paga sin ni siquiera encender un solo interruptor- conllevará un incremento de la tarifa para los clientes que menos consumen. Por ejemplo los más penalizados serán los propietarios de casas vacías o de segundas residencias con escasa utilización. Pero también (ojo, esto es importante) se verán muy castigados los consumidores que habían optado por reducir su consumo por cuestiones económicas o medioambientales. Las familias que ya habían reducido al mínimo su consumo de luz por no poder afrontar el pago del recibo (en España hay 1,7 millones de hogares que sufren pobreza energética), verán cómo sus esfuerzos quedan sin efecto porque el pago fijo aumenta. 

Las casas vacías o las segundas residencias que no hagan ningún consumo verán cómo sus recibos suben un 20% en relación a lo que pagaban el año pasado. Según vaya creciendo el consumo eléctrico (medido en horas de consumo) ese efecto del alza de la cuota fija se irá reduciendo. La nueva composición del recibo supondrá un incremento de la tarifa para los clientes que no consumen nada y seguirá conllevando una subida hasta que se alcanzan las 610 horas al año (poco más de hora y media al día), según los cálculos de la CNMC [ver gráfico]

Gráfico: César Valera


Los que más gastan más ahorran 

A partir de ese punto de equilibrio, el nuevo recibo conllevará para el cliente un ahorro en relación al año pasado. Cuando el consumo eléctrico va siendo mayor, el impacto del alza de la cuota fija se diluye y es más evidente el efecto de la rebaja de la parte variable. Un cliente que consuma a plena potencia durante las 8.760 horas que tiene el año verá cómo su recibo de la luz baja un 15%. Al menos relativamente, ya que todos estos cálculos de la CNMC se hacen en función del nivel que tenían la parte fija y la variable en 2013, y no tienen en cuenta la subida media de la factura del 2,3% que se aplica desde enero. 

Es evidente que los clientes que más consuman más pagarán, como siempre. Pero son los clientes que más consumen los que van a experimentar un mayor ahorro en sus recibos gracias a la última medida del Gobierno. Un resultado que va en contra de los esfuerzos para fomentar la eficiencia energética y reducir el consumo. El gran argumento que esgrime el Gobierno para defender la nueva composición de la factura es que beneficiará a las familias con varios hijos, que verán muy probablemente cómo su recibo baja un poco durante este año por su alto consumo eléctrico. Las grandes beneficiadas, en cualquier caso, serán las compañías eléctricas; no tanto porque sus ingresos crezcan de manera inmediata, sino porque se garantizan unos ingresos fijos y reducen su exposición al consumo variable de los clientes. 

Del tarifazo a la incertidumbre 

El caos en que parece que se ha instalado el sector eléctrico ha hecho que los consumidores hayan estado durante semanas sin saber en qué medida subiría la factura en enero. Y una vez que lo supieron los nuevos cambios en la estructura del recibo ha vuelto a complicarlo todo. La subasta que fija(ba) el precio de en torno a la mitad del recibo para el primer trimestre de 2014, que se celebró el 19 de diciembre, se desbocó y empujaba a subir la factura un 11%

El Gobierno se opuso a aplicar tal 'tarifazo' y la CNMC acabó por suspender el resultado de la subasta por "circunstancias atípicas" y "falta de presión competitiva", aunque evitó acusar a los participantes (fondos de inversión, traders y compañías eléctricas) de haber manipulado el resultado para forzar la subida del recibo. El Ministerio de Industria decidió intervenir los precios y tuvo que improvisar qué tarifa aplicar durante el primer trimestre del año. Frente a las acusaciones del sector de aplicar una fórmula arbitraria, el departamento dirigido por José Manuel Soria anunció una subida del recibo de la luz del 2,3% a partir de enero

Industria va a poner fin en abril al sistema de subastas y lo va a sustituir por otro modelo en que el precio final de la luz vendrá marcado por el precio del mercado mayorista (pool). El Gobierno revolucionará así el mecanismo de fijación de precios y lo hará similar al funcionamiento de la bolsa: los usuarios que tengan contadores inteligentes podrán pagar la electricidad justo al precio que marca el mercado mayorista en el momento en que es consumida y los que no lo tengan pagarán el precio medio del pool durante los dos meses anteriores. Según los cálculos del Gobierno, esta medida permitiría rebajar el precio de la luz un 3%... pero eso va a depender de cómo evolucionen los precios en el mercado mayorista.

Articulo escrito por: David Page y publicado en: Expansión

El Gobierno propone que las eléctricas paguen el 99% del bono social


El Gobierno ha propuesto que las cinco grandes eléctricas sufraguen este año el 99,3 % del coste del bono social, una tarifa subvencionada para las familias con menos recursos, de acuerdo al borrador de orden ministerial al que ha tenido acceso a EFE. 

El borrador de orden fija el porcentaje que tendrá que abonar cada una de las veintisiete eléctricas integradas contempladas por el Gobierno en concepto de bono social. Las mayores aportaciones corresponden a las cinco grandes eléctricas: Endesa (41,62 %), Iberdrola (38,47 %), Gas Natural Fenosa (14,19 %), Hidroeléctrica del Cantábrico (2,65 %) y E.ON España (2,37 %). 

La reforma energética aprobada el pasado año determinó que las eléctricas integradas -es decir, aquellas que aglutinan actividades de producción, distribución y comercialización- asumieran el coste del bono social. 

Actualmente, el bono social lo pagan el resto de consumidores a través de la factura, después de que los tribunales rechazaran el modelo que obligaba a las cinco grandes a cargar con este coste, que en 2013 ascendió a 228,4 millones de euros. 

De acuerdo a la memoria que acompaña a la propuesta de orden, "la traslación del coste del bono social al conjunto de los consumidores se revela como especialmente inadecuada en el presente momento", por lo que se decidió trasladarlo a las empresas. 

Así, reconoce que la medida "tiene impacto" en los grupos "veticalmente integrados, si bien la imposición de esta obligación (...) permite, siquiera sea indirectamente, repartir dicha carga entre las principales actividades empresariales intervinientes en el sector eléctrico". El borrador de orden ha sido remitido por la vía de urgencia a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que dispondrá de cinco días para presentar alegaciones.

domingo, 2 de febrero de 2014

Millones de hogares deberán instalar nuevos contadores de calefacción


Millones de hogares van a tener que rascarse el bolsillo en los tres próximos años para adaptarse a la normativa que tiene previsto aprobar el Gobierno. 

En concreto, para cumplir con las directivas europeas de eficiencia energética, aquellos pisos con calefacción y agua caliente central tendrán que poner contadores individualizados para que cada vivienda sepa cuánto gasta realmente de energía. 

Es una de las medidas que contempla el nuevo borrador de real decreto por el que se transpone la directiva 2012/27UE del Parlamento Europeo, relativa a la eficiencia energética. 

Según el borrador de real decreto, "en los edificios que cuenten con una instalación centralizada de calefacción-refrigeración o estén abastecidos por una red de calefacción urbana o por una instalación centralizada que dé servicio a varios edificios, se instalarán contadores de consumo individuales, que midan el consumo de calor o refrigeración o agua caliente de cada vivienda o cliente final". 

Así, "en el caso de la calefacción, cuando el uso de contadores de consumo individuales no sea técnicamente viable, se utilizarán repartidores de costes de calefacción para medir el consumo de calor de cada radiador". La idea es que la comunidad de vecinos pase facturas individualizadas, para que cada uno pague por lo que realmente gasta y sea más sensible con el ahorro energético. Si hay bloques de viviendas que no pueden poner contadores al lado de la caldera, tendrán que poner un sistema conocido como "medidores" de calor. Son aparatitos en el radiador que miden el calor que emiten, y hacen un cómputo de la energía que gasta esa vivienda. 

Estos sistemas de medición están muy extendidos en países como Alemania. 

En España, se calcula que hay 1,5 millones de viviendas que van a tener que modificar sus instalaciones de calefacción y agua central para adaptarse a la normativa. 

El plazo que inicialmente se contempla como tope para la adaptación es el 31 de diciembre de 2016. 

Las nuevas exigencias de eficiencia energética proceden de un campo de desarrollo para grupos especializados en este segmento, entre ellos el grupo europeo Ista, una de las pocas compañías energéticas en España con previsión de nuevas contrataciones en los próximos meses.

Articulo escrito por: Miguel Ángel Patiño y publicado en: Expansión